Quizás por pertinez, obcecación, empecinamiento o terquedad, es por lo que hoy he cogido la bicicleta.. Incluso desde Marbella me han advertido que no saliera porque iba a llover. Y uno que es asi de obstinado, se pone la ropa de ciclismo, empaqueta la camiseta solidaria, y se dirige a la pasarela de RENFE con la intención de llegar a los Pozos de Malasnoches.
El cielo estaba nublado, pero no llovía ni amenazaba lluvia a las 8:30 así me dispuse a poner en práctica mi proyecto.
El camino ya es de sobra conocido como para describirlo de nuevo...
Por entre pinares y sorteando las raices de los pinos que atravesaban las cañadas fuí hasta el Descansadero del Martillo del Tejarejo, donde hay una placa dedicada a la memoria de Concha Ostos de parte de sus compañeros.
No sé quién sería esta señora, pero cada vez que paso por allí me paro a recordarla un momento. Debía ser buena persona porque sus compañeros la homenajearon con esta placa.
Mas o menos llevaba 12 Km recorridos desde mi casa (asi lo marcaba el odómetro). Al volverme oí un sordo ruido a lo lejos...
Me acerqué a unos piñeros que por allí trabajaban y les pregunté que era ese sonido. Tormentas, me dijeron. Asi que mi cerebro entró en alerta. Me apresuré lo que pude a ajustarme la ropa, calarme los pedales y apretar los dientes.... Por detrás me venía siguiendo una enorme tormenta. Me planteé el objetivo de llegar lo mas pronto posible al Hospital Clínico de Puerto Real para guarecerme bajo su techo. Y así lo hice.
Mientras me aproximaba al Hospital iban acercándose las tormentas y con ellas los relámpagos. Em pezaba a temerme que me cayera un rayo encima. Algunas gotas empezaron a caer. Aumenté la velocidad y el riesgo a caerme por lo irregular del terreno.....Seguí así, brincando, saltando y derrapando, hasta llegar a ponerme bajo techo. Eran las 10:00
Apenas llegué a la zona de urgencias empezó a caer la de San Pedro. creo que se le cayeron las dos cubetas de las manos....
Y allí estuve mas de media hora viéndo caer el agua. Estuve charlando con un amigo que venía al médico, con otro que venía de visitar a un enfermo... con el vigilante que tambien es ciclista....Y esperé cómodamente mientras llovía. Se me pasó el tiempo volando. Escampó y yo tenía que volver a mi casa. Pero para asegurarme pe puse el chubasquero.
Y así hasta que llegué a mi casa.. He conseguido hacer 23 Km sin mojarme, pero no he llegado a los Pozos de Malasnoches.... Otro día será.